Los yates más lujosos del mundo se congregan en Mónaco para el Gran Premio de Fórmula 1, creando un espectáculo paralelo de opulencia y exclusividad. Cada año, este evento deportivo de renombre mundial transforma las calles de la ciudad monegasca en un escenario vibrante, donde los bólidos de Fórmula 1 rugen a más de 200 kilómetros por hora, deleitando a los aficionados presentes.
Uno de los aspectos más icónicos y reconocibles del circuito es la recta del puerto, donde se alinean cientos de yates de lujo, ofreciendo a sus afortunados ocupantes vistas privilegiadas de la carrera. A lo largo de los años, estos mega yates han sido testigos de momentos memorables, desde la exhibición de un Ferrari en uno de ellos el año pasado hasta la visita de Kimi Raikkonen, quien, al abandonar la carrera, optó por dirigirse directamente a su yate en lugar de regresar a los boxes.
Además de ser el lugar ideal para presenciar la carrera, los yates también son el escenario perfecto para fiestas exclusivas que se prolongan hasta altas horas de la madrugada, especialmente si se es parte del equipo ganador de este prestigioso Gran Premio.
Pero, ¿cuánto cuesta amarrar un yate en el puerto de Mónaco durante este evento? Los precios son tan exorbitantes como el lujo que representan. Mientras que en la zona menos cotizada el costo puede ascender a 10.000€, las embarcaciones de más de 100 metros de eslora pueden llegar a pagar hasta 145.000€. Asistir a una de las famosas fiestas organizadas tiene un precio de 600€ por persona, mientras que los invitados que no forman parte de la tripulación deben desembolsar 200€ por persona.
Estos precios estratosféricos están fuera del alcance de la mayoría, por lo que las personas que ocupan estas plazas suelen ser celebridades o representantes de los diversos equipos de la parrilla de Fórmula 1. Entre los rostros famosos que han sido avistados disfrutando del Gran Premio de Mónaco desde sus yates se encuentran Georgina, la pareja de Cristiano Ronaldo, quien fue captada en la miniserie de Netflix "Soy Georgina", así como el tenista Rafael Nadal, entre otros.
