¿Qué secretos revela el hallazgo de la tumba de Tutmosis II tras 3.500 años de misterio?

En un descubrimiento que ha sacudido al mundo de la arqueología, se ha desenterrado la tumba del faraón Tutmosis II, un monarca que gobernó Egipto hace más de 3.500 años. Este hallazgo, considerado el más significativo desde la apertura de la tumba de Tutankamón en 1922, ofrece nuevas perspectivas sobre una figura histórica envuelta en enigmas.

La tumba fue localizada en octubre de 2022 en Wadi Gabbanat el-Qurud, al oeste de Luxor, a unos 2,4 kilómetros del Valle de los Reyes. Un equipo conjunto de arqueólogos británicos y egipcios, liderado por la New Kingdom Research Foundation (NKRF) y el Consejo Supremo de Antigüedades de Egipto, trabajó durante dos años en el sitio antes de confirmar la identidad del faraón enterrado. 

El diseño arquitectónico de la tumba es sencillo pero significativo, reflejando las prácticas funerarias de la XVIII Dinastía. La estructura consta de tres cámaras principales y dos pasillos, con evidencias de ampliaciones posteriores. Aunque la decoración ha sufrido daños debido a inundaciones, se han encontrado fragmentos que indican la presencia del "Libro del Amduat", un texto funerario reservado para la realeza.

Entre los artefactos descubiertos se hallaron vasijas de alabastro con inscripciones jeroglíficas que mencionan a Tutmosis II y a su esposa y hermana, Hatshepsut. Estas inscripciones sugieren que Hatshepsut pudo haber supervisado los ritos funerarios de Tutmosis II, lo que aporta información sobre la sucesión y las dinámicas de poder de la época. 

Aunque la momia de Tutmosis II no se encontró en la tumba, se sabe que fue trasladada al escondite de Deir el-Bahari, donde fue descubierta en 1881. Este hallazgo reciente, sin embargo, proporciona contexto sobre el lugar original de su entierro y las condiciones que llevaron a su reubicación. 

Este descubrimiento no solo enriquece nuestro conocimiento sobre Tutmosis II, sino que también destaca la importancia de la colaboración internacional en el campo de la arqueología. La posibilidad de encontrar una segunda tumba intacta del faraón añade un nuevo capítulo a esta apasionante historia, manteniendo viva la esperanza de futuros hallazgos que desvelen más secretos del antiguo Egipto.

El equipo ya había explorado 54 tumbas en la zona occidental de la montaña tebana en Luxor, además de haber identificado a más de 30 consortes reales y mujeres de la corte.

"Esta es la primera tumba real que se halla desde el descubrimiento revolucionario de la cámara funeraria del rey Tutankamón en 1922", dijo el ministro de Turismo y Antigüedades de Egipto, Sherif Fathy.
"Es un momento extraordinario para la egiptología y para una comprensión más amplia de nuestra historia humana compartida", agregó.