En un esfuerzo por regular el mercado de alquileres turísticos y abordar preocupaciones de seguridad, el Ayuntamiento de Roma ha implementado una medida que exige a los propietarios de alojamientos turísticos recibir personalmente a sus huéspedes. Esta iniciativa busca eliminar el uso de las populares 'keyboxes' o cajas de seguridad para llaves, que permitían a los turistas acceder a las propiedades sin interacción directa con los anfitriones.
Desde enero de 2025, las autoridades municipales han comenzado a retirar estas cajas de seguridad de las calles, puertas y portales de la ciudad. El concejal de Turismo de Roma, Alessandro Onorato, ha liderado esta campaña, afirmando que es solo el comienzo y que continuarán hasta que prevalezcan el decoro y la legalidad.
La proliferación de 'keyboxes' en lugares públicos, como señales de tráfico y farolas, había generado preocupación entre los residentes y las autoridades locales. Para facilitar su retirada, el Ayuntamiento habilitó un correo electrónico para que los ciudadanos denuncien su presencia, permitiendo a la policía local actuar en consecuencia.
Esta medida tiene como objetivo principal garantizar que los propietarios de viviendas turísticas conozcan personalmente a sus inquilinos de corta estancia, reforzando así la seguridad y el control sobre las actividades de alquiler turístico en la ciudad. Onorato confía en que, con la atención y participación constante de la ciudadanía, los dueños de estos alojamientos comprendan que este juego ha durado demasiado.
La iniciativa de Roma podría sentar un precedente para otras ciudades europeas que enfrentan desafíos similares con el crecimiento de los alquileres turísticos y su impacto en las comunidades locales. La interacción directa entre anfitriones y huéspedes no solo busca mejorar la seguridad, sino también fomentar una experiencia turística más auténtica y responsable.
Mientras tanto, en España, el Gobierno continúa implementando medidas para regular las viviendas de uso turístico. A partir del 3 de abril, una nueva normativa exigirá que los propietarios obtengan la aprobación de tres quintas partes de los vecinos de su comunidad para destinar sus inmuebles a alquiler turístico, entre otras disposiciones. Además, la Agencia Tributaria ha anunciado un incremento en los controles para identificar rentas no declaradas en este sector.
Estas acciones reflejan una tendencia creciente en las principales ciudades europeas para equilibrar la oferta turística con la calidad de vida de los residentes, asegurando que el turismo sostenible beneficie tanto a visitantes como a locales.